Cuento para Soñar

La noche irrumpe con su silencio dentro del agónico atardecer, las calles poco a poco se vacían, la gente regresa a sus hogares, los locos como yo se dedican a vagar en las calles cuales lobos salvajes.....
La luz natural del día también va desapareciendo tenuemente, esta es sustituida por luces de halógeno y neón....
Pocos son los lugares faltos de luz y es ahí donde nosotros nos escondemos, seres de la oscuridad, amantes del fulgor nocturno, deborando sueños y esperanzas ajenos para poder tener momentos de humanidad, momentos de felicidad y tal vez un alma propia...

Por las noches la gente protege sus miedos de las maneras mas extrañas, se cubren con mantos de rezos, suplican a dioses ciegos y eternos, abrazan rosarios a sus corazones, se abrazan unos a otros buscando el refugio que su espíritu débil no les puede dar, otros tratan de ocultar sus temores en la luz y dejan prendidas lamparas y focos.

Cuando entra una pequeña brisa por la puerta o la ventana y les roza el cuello o el rostro, rezan con mas fuerza se aferran a las cobijas he incluso hay quienes hacen el signo de la cruz, pues piensan que un diablo ha escapado del infierno y ahora viene a cobrarles por sus pecados.
El miedo un sentimiento primitivo, este a veces salva a los humanos de algun peligro, por eso viven en comunidad asi se protegen unos a otros...

Esto me entristece un poco, pues estos Sentimientos humanos desde hace tiempo me han abandonado, hace tanto que vago por estas ciudades nocturnas en busca de vida, pues la mía solo es muerte... He perdido el sentir, la humanidad, mi piel se ha endurecido al tacto, mis ojos se cerraron ante lo hermoso y yo me he abandonado en la eternidad.

Después de varias horas vagando por parajes nocturnos, tratando de encontrarme a mi mismo, llego al lugar que llamo hogar, un sitio solo para mi y la soledad que me acompaña, casi no hay ruido solo un leve sonido de agua en las afueras. Parece que comienza a llover.
Me siento junto a la ventana, apago la luz y prendo una vela, su llanto ilumina las paredes de mi habitación, tomo un cigarrillo y lo enciendo con la llama...

Contemplo la caida de la lluvia suave y errática, las lamparas del exterior iluminan las gotas, pareciera una lluvia de luces.

Tomo una bocanada de humo, esta juega en mi garganta, siento su escosor y lo libero.

El humo desprendido se transforma y toma figuras con la brisa, sentado contemplo la lluvia y pienso, ¿En donde podre encontrar esa humanidad que una vez me abandono sin volver?

También pienso en toda esa gente que pasa la vida sencilla mente, sin miedos(claro durante el día), sin prejuicios, hiendo de un lado a otro sin mas, que tendrán ellos que yo no, claro la humanidad, pero hay otra cosa que me falta, o sera que ellos esconden la verdad detrás de grotescas mascarás humanas, tal vez nunca lo sepa.... De cualkier forma ya no importa, quien sabe tal ves esta sea mi ultima noche, hojala rencontrarse a si mismo, pues yo ya estoy cansado, aburrido, me siento viejo y olvidado, que ironía pues no paso nisiquiera de los 20.

Pasan las horas discontinuas y yo espero que alguien en mi situación lea esto y le sirva de algo, para no quedar como yo o no se, tal vez solo como una lectura y ya, bueno la vela se esta apagando poco a poco como nosotros, paso mi mano sobre la llama y queda en mi palma una olor a quemado y a parafina, pienso si yo también seré de parafina como una vela, y una noche me derretiré dentro de los miedos de alguna persona que se refugie en el fulgor.

La llama ahora casi se ha extinguido, yo también debo hacerlo, duerme bien ser de luz, recuerda que siempre habrá alguien ahí vagando por los cielos sin dueño robando la esperanza y el amor, para conseguir un alma tal vez.....

Siento que la vida se me escapa con el ultimo fulgor de la vela, mi sangre se va como el humo etéreo, tal vez ahora si pueda descansar y en algun momento me reuna con mi humanidad y contigo....